Con unas hondarras de calabaza y remolacha de la entrada anterior y añadiendo alguna verdura más he hecho este milhojas. Muy fácil de hacer y que admite tantas variantes como permita la imaginación.
Ingredientes:
Calabaza, pimiento rojo, calabacín, remolacha cocida y queso curado.
Elaboración:
Primero se asan los pimientos rojos, se pelan y se reservan teniendo cuidado de recoger en un recipiente todos los jugos que sueltan al asarse (se puede hacer también con piquillos confitados). Se parten finas rodajas de calabaza, calabacín y remolacha cocida. Las rodajas de calabaza se ponen en papel sulfurizado, se untan de aceite de oliva por ambas caras y se hornean a unos 170 grados durante 6 o 7 minutos. Las rodajas de calabacín se pasan por una sartén con un poco de aceite hasta que cojan color. Los pimientos asados se cortan en círculos y se reservan. Con los recortes sobrantes del pimiento asado se hace una salsa de la siguiente forma: se pica un diente de ajo y se pone en la sartén con un poco de aceite de oliva, justo cuando empieza a coger color se añaden los recortes de pimiento y se saltea, añadiendo unos minutos más tarde los jugos reservados. Se mantiene unos minutos y cuando queda casi sin líquido se tritura añadiendo un poco más de aceite de oliva. Tiene que quedar una salsa tirando a espesa.
Para el montaje del plato primero se coloca una rodaja de calabaza asada, encima un aro de pimiento asado, encima unas rodajas de calabacín, encima del calabacín una rodaja de remolacha, y se repite este proceso hasta completar el milhojas. Se ralla un poco de queso del que se tenga a mano y se espolvorea por encima. Se mete al horno a gratinar y se sirve poniendo un poco de salsa de pimientos en el fondo del plato. También se puede calentar el milhojas en el horno unos minutos y añadir el queso rallado en crudo una vez que el milhojas está caliente. Se pone un poco de aceite de remolacha y ya está. A disfrutar!